Aplicaciones

Aplicaciones de Radiónica

La Radiónica, si bien en un principio sólo se aplicó en la salud humana, a medida que se fue conociendo se extendió a todos los campos de la Biología. Hoy se ha convertido en una técnica multidisciplinar que precisa para su investigación del concurso de expertos y científicos en múltiples áreas. Además, al actuar a través de la mente del operador radiónico que codifica la información que ha de emitir mediante los instrumentos radiónicos, se amplía mucho más el campo de sus aplicaciones.

En líneas generales, la Radiónica se utiliza actualmente también en Veterinaria para el tratamiento de enfermedades animales. En este apartado destacan los trabajos realizados por miembros de la Asociación Radiónica de Inglaterra con los problemas vertebrales de los caballos de carreras, perros, gatos, etc. La Agricultura es otro de los campos donde este arte-ciencia obtiene sus mejores resultados; de hecho, desde hace muchos años se recurre a él con gran éxito para mejorar la calidad de los productos agrícolas, aumentar el rendimiento de las tierras de labor, ahorrar en fertilizantes y agua, y combatir las plagas de insectos, hongos y malas hierbas que asolan las cosechas. Además, su interés para la agricultura biológica no tiene precio. Empleada desde los años cuarenta en Estados Unidos y posteriormente en Europa, también en nuestro país, España, tenemos amplia experiencia en este área gracias a las investigaciones que está llevando el Instituto Científico Multidisciplinar Jovellanos, donde se investiga sobre la aplicación de la Radiónica en diversos cultivos (cereales, hortalizas, frutas, etc.).

Asimismo, la conservación de alimentos ha recurrido a esta técnica con notable éxito desde sus principio aunque su utilización hoy esté restringida debido al desarrollo de otras tecnologías de conservación. No obstante, su uso debería promocionarse más con objeto de un sistema de conservación de alimentos que permitiese evitar al máximo los conservantes y estabilizantes químicos, algunos muy peligrosos para la salud.

Por otro lado, la Radiónica resulta fundamental en Geobiología, donde se ha decantado como una técnica importantísima para neutralizar las radiaciones nocivas para la salud humana que existen en viviendas y lugares de trabajo. Así pues, permite armonizar, mediante el uso de sencillos instrumentos, las radiaciones naturales o artificiales nocivas para la salud y hacer habitables lugares que no lo eran. Y no conviene olvidar que se emplea también para otras muchas cosas, como mejorar la producción y la calidad del vino, transmitir mensajes de forma telepática, aumentar la calidad del agua potable y la del agua para riego de las plantas, disminuir el consumo de gasolina en los automóviles, etc.

Por último, la salud humana es el terreno donde más se ha estudiado y aplicado la Radiónica desde los tiempos de Abrams; no en vano, fue en la medicina dónde comenzó la historia de esta técnica. Por su enorme amplitud, sería imposible proporcionar en el espacio de este artículo una lista de las enfermedades donde puede utilizarse, pero existen archivos en las asociaciones de Radiónica de los diversos países a los que el lector interesado puede dirigirse.

En España los médicos de la Fundación C.I.A.T.R.A. han tratado a más de 19.884 enfermos, de los que tienen perfectamente estudiados a efectos de seguimiento y control a 6.858, todos ellos pacientes de diversas enfermedades que han sido tratados con métodos radiónicos. El estudio demuestra que la terapia radiónica puede contribuir notablemente a la lucha contra el dolor y la enfermedad, siempre considerándola como un instrumento complementario a la medicina moderna. Además, aunque se trata de algo muy difícil de realizar, Ruth Drown y G. de la Warr han demostrado que es posible realizar fotografías a distancia de lo que le está ocurriendo a un paciente, utilizando para ello un instrumento radiónico adecuado que ha de ser manejado por un operador experto y suficientemente sensitivo.